No hay tres sin cuatro.
Sí, si ósea que si que lo admito, que he cambiado un refrán pa adaptarlo a mi vida, el típico no hay dos sin tres, se cambio a no hay tres sin cuatro. Faltaría mas, no cambiar un refrán para darle titulo a este pedazo de capítulo irrepetible en mi vida.
Creereis que no, que no podía irme peor después de todos los chascados escritos en los anteriores blogs, y que al haber tardado casi un año en escribir que quizas ya me vaya mejor con lo que amores respecta, pues no, en resumen no, la pandemia, corona el aburrimiento solo me ha hecho conocer a semejantes bufones y poco hombres que si oficialmente me declaro SOLTERA pa siempre y como he llegado a esto os preguntareis, pues todo empezó...
En un otoño, Alemania en otoño esta congelada, el frio que hace en este país no es normal, que ya puedo vivir aquí desde hace años que no me acostumbro. Hace un tiempo en mi puesto de trabajo conocí a una señora, algo rara pero bastante maja como para caerme bien. Llevaba años viéndola por el barrio y por mi zona de trabajo. En ese otoño no se ni como ni porque, consiguió mi numero , y decidió presentarme a su hermano. HULKADO, ay hulkado, que pena me dabas. Un chico bastante guapo, alto, supuestamente inteligente, buen musulman, a primera vista parecía que el destino porfi me había sonreído.
Le conocí, y a medida que el tiempo pasaba, nuestras conversaciones se alargaban, me daba cuenta de que nada era como yo creía, una persona bastante inculta, egoísta y que solo le importaban las apariencias no lo que realmente me importa a mi que va mucho mas alla de las opiniones de otras personas un fisicoquímicos y una reputación. Al pasar el tiempo sentí que el chico incluso le empezaba a dar vergüenza mantener una conversación conmigo porque se contradecía todo el tiempo, el como se comportaba y como se describía el al principio distaba mucho de lo imaginado. Pero aun así nunca llego a plantarle cara y siguió alargando una relación que tanto el como yo sabíamos que no iba a ningun lado. Decidimos vernos en persona.. oyoyoy Era un viernes y esa semana que digamos no me encontraba muy bien, tenia unos dolores extraños, estaba en mis días e incluso tenia fiebre, a pesar de todo eso decidi no cancelar mi cita, un error porque a las semanas me entere de que tenia COVID19 ... *ajajjaja a ver me rio por no llorar, pero espero no haber sido yo la culpable de que su familia acabara ingresada.
La cita fue bastante bien, pero a medida que pasaba la tarde yo me encontraba peor, y peor y peor, hasta que llego un momento que ni acordaba de lo que decía o hacia, consejo mío pa todos no vayáis a primeras citas sin estas fit 100% vais a parecer retrasados. Tomamos un cafe y el chico me gustaba bastante, pero lo que rápido sube rápido baja, era 11 años mas mayor que yo, estaba divorciado, pero la verdad que me no me importo, hasta que me demostro que realmente se divorcio por su carácter, descrito anteriormente.
La relación duro unos meses hasta que decidi pararlo yo, y al hacer eso, se sintió tan mal que acabo casi insultándome y echándome la culpa a mi por ser una inmadura.
AY HULKADO,que triste escribir tu historia.
La verdad que lo pase mal después de esta relación y que u año después me rio, no fue por la persona si no por la situación por la que me puse triste, me hice ilusiones innecesarias y justifique cada acto y cada mensaje que el escribir.
NO LO HAGAIS, nunca justifiqueis los actos de nadie, si una persona se comporta como se comporta es porque le da la gana.
FIN
y hasta pronto que aun me queda contaros sobre Enfermero, Calvo de Prusia y Huevos pa dentro
Comentarios
Publicar un comentario